¿Cómo se pesca la coquina de Huelva?

La coquina de Huelva, Donax Trunculus, es un marisco de concha muy fino al que, en otras zonas de España, se le llama de otras formas: tellinas, tellerinas, petxinas… Entre los mariscos de concha y sin que tenga un precio muy alto como en otros mariscos, es uno de los más apreciados por su sabor a mar y la delicadeza de su textura.

En nuestra costa pocos son los restaurantes, terrazas y bares que no ofrecen en su carta las coquinas al ajillo, uno de los platos marineros que más se consumen en Huelva tanto por locales como por visitantes estivales.

¿Cómo se pesca la coquina de Huelva?

Las coquinas se marisquean de dos formas principales:

La coquina de pie

Es la coquina que se captura con el método más tradicional, el rastro. El rastro es una herramienta de pesca manual y hecha a mano. Consiste en una esclusa unida a un palo la cual se arrastra a mano por el fondo de la orilla de las playas donde hay coquinas. Una vez se obtiene la captura, el material recogido por el rastro se esparce en la orilla, se seleccionan las coquinas y se desechan los restos de arena y conchas. Posteriormente, las coquinas se pasan por una «zaranda»; una herramienta que permite separar las coquinas buenas de los especímenes inmaduros, que serán devueltos al mar. Con este tipo de arte también se suelen capturar otros mariscos de concha como la chirla de Huelva o el berberecho, aunque en mucho menor medida.

La coquina de Huelva de pie suele ser de tamaño mediano ya que las de mayor tamaño habitan en profundidades donde no llega el rastro manual. No obstante, aunque tengan menor tamaño, el arte del rastro respeta mucho al marisco por lo que su calidad y frescura no se ven perjudicadas al mantenerlo vivo.

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La coquina de barco

Es la coquina que se captura desde pequeñas embarcaciones. Se trata de un arte con el que se obtienen capturas abundantes ya que utiliza un rastro grande arrastrada por la embarcación. Las capturas también son de mayor tamaño ya que la pesca se realiza en aguas más profundas en la orilla de nuestras costas. No obstante, no debemos equivocarnos, aunque las coquinas de barco sean mayores, este arte maltrata al marisco de concha, haciendo que muchos especímenes mueran y no se abran al cocinar. Es por esto que por lo general la coquina de barco es de peor calidad y de menos frescura que la coquina de pie.